Mientras se trabaja la transición a Instituto Universitario de Actividad Física y Deportes, el IEF sigue desbordado de jóvenes que quieren estudiar en la institución.
Maxi Salgado (Comunicación IEF)
Las postales son recurrentes año tras año, abrazos y risas por un lado, caras largas por otro y una que otra lágrima. La vida misma se da cita en cada ingreso del Instituto de Educación Física 9-016 «Jorge E. Coll», en la primera prueba de ingreso de la temporada que tiene que ver con la carrera madre, la del Profesorado de Educación Física.
Después llegará el turno de las diferentes tecnicaturas (Preparación Física, Actividades de Montaña, Conservación de la Naturaleza) y la Formación Profesional en Guardavidas.
Este año, sólo en la sede de Godoy Cruz donde durante miércoles, jueves y viernes se completaron los exámenes cognitivos y motrices, hubo 435 aspirantes de los cuáles ingresarán 200.
Mientras que en la sede de Rivadavia hubo 130 aspirantes y 156 en San Rafael. En las dos sedes se rindió el cognitivo y la semana próxima será el turno de las pruebas motrices.
El número de aspirantes que pasarán este año por la institución es cercano a 1.000 ya que 320 personas se anotaron para ingresar a Tecnicatura de Montaña, 150 para Preparación física, 110 para Conservación de la Naturaleza entre Godoy y Cruz y Malargüe y 50 para Guardavidas.
«El examen siempre es un día especial, porque para muchos chicos es la primera vez que tienen contacto con el Instituto y vienen con muchos nervios. Algunos demuestran haberse preparado a conciencia y otros vienen con la esperanza de un guiño de la suerte”, cuenta Gabriel Scollo, coordinador del ingreso desde hace muchos años.
Los aspirantes rinden ocho pruebas motrices (fuerza, resistencia, flexibilidad, prácticas gimnasticas, natación, salto en largo, prácticas sicomotrices y deporte a elección), estas dos últimas regresaron después de tres años. Las mismas fueron suspendidas durante la Pandemia debido a las restricciones que impuso la misma.
El Magister Luis Castillo, rector de la institución, dio algunos detalles del ingreso y la vida institucional. «Gracias a Dios son siempre más de 1.000 estudiantes que se interesan por participar el ingreso de las distintas carreras.
Por ahora estamos dándole continuidad a los planes de estudios que tenemos como Instituto Terciario de Formación Docente y Técnica, pero si estamos desde la gestión llevando a cabo una agenda para avisorar los cambios que traerá el Instituto universitario.
Una de las metas que tenemos es, en las pruebas de ingreso, ir haciéndolas más genéricas, porque nuestras carreras todas tienen que ver con la actividad física y con un ingreso importante de la tecnología. Como chips para medir distancias en algunas pruebas de resistencias, GPS para deportes, también el láser para medir la capacidad de salto», adelantó.
Por último hizo hincapié en la equidad de género, un tema que se viene trabajando desde hace bastante.
«Tenemos una responsabilidad, como institución formadora, de trabajar mucho en la igualdad de género y de posibilidades y oportunidades».
¿Qué significa convertirse en Instituto Universitario?
Este proyecto no cambia la dependencia de la actual coordinación general de Educación Superior, porque la ley provincial ya prevé la creación de institutos universitarios. Actualmente existe una problemática de equiparación nacional con los títulos que el Instituto Universitario va a ordenar. Está en el ADN de la institución buscar permanentemente nuevos desafíos, nuevos rumbos. A partir de la creación del Instituto Universitario se va a aportar para reordenar las titulaciones.
Según establece la Ley de educación, los institutos universitarios ofrecen formación en una sola área disciplinaria. Las universidades, en cambio, ofrecen formación en distintas disciplinas. «Dar continuidad a las funciones ejercidas hasta la fecha por el I.E.F Nº 9-016 traspasando obligaciones académicas, recursos humanos, materiales y edilicios de la misma al Instituto Universitario de Actividad Física y Deportes creado en la presente norma”, reza el fragmento de la propuesta mendocina que fue presentada por Juan Carlos Jaliff en el 2017 y rescatada por Gustavo Pinto a poco de ser archivada. La misma que la semana que viene espera el visto bueno de nuestros Diputados.